El noroccidente de la Sierra Nevada de Santa Marta, al norte de Colombia, fue habitado desde el año 200 d.C. hasta la Conquista por agricultores y artesanos de la piedra y el metal que aprovecharon los recursos disponibles desde el mar hasta las nieves perpetuas, a quienes se les denomina la nación Tayrona
Los Tayrona contaban con una compleja organización sociopolítica, y con un avanzado conocimiento de la ingeniería y la arquitectura que se refleja en los restos de grandes obras líticas, plantas de habitación, caminos, muros de contención, escaleras y puentes.
Inicialmente asentados en el litoral, se expandieron luego hacia las zonas altas donde construyeron ciudades de piedra. Su historia prehispánica comprende los períodos Nahuange y Tayrona. Actualmente habitan allí los koguis, wiwas, ikas y kankuamos.
Los Tayronas descuellan como ejemplo de la insistencia en al autenticidad, que les costo ser aniquilados bárbaramente después de un siglo de constante lucha contra el dominador. Indómitos y belicosos, no aceptaron el yugo español, que implicaba el renunciamiento a sus costumbres ancestrales, a su idioma, a su núcleo social y sobre todo a sus creencias religiosas.